Corea del Sur elevó el domingo 23 la alerta por COVID-19 al nivel superior "Nivel Grave".
El presidente Moon Jae In anunció la medida, puntualizando que "los próximos días serán muy importantes" para frenar el contagio de COVID-19.
Expresó que el Gobierno reforzará el sistema de respuesta general, tras elevar al máximo el nivel de alerta en una reunión de medidas gubernamentales contra el COVID-19, que lideró el domingo en la sede gubernamental de Seúl.
Así, confirmó que Daegu y Cheongdo, en la provincia de Gyeongsang del Norte, fueron decretadas como "zona de control especial" por enfermedades infecciosas, y dispondrán de recursos extra como camas, mano de obra, y equipamientos de cuarentena que no puedan garantizar a nivel regional.
Asimismo, puntualizó que el cierre de instalaciones relacionadas con la secta Shincheonji y la investigación de las actividades de sus miembros en todo el país resulta imprescindible para proteger la salud y la seguridad pública, y en ningún caso busca restringir la libertad de culto, llamando a cooperar a los seguidores de esa secta cristiana.
El mandatario enfatizó que aunque la situación es grave podrán manejarla, asegurando que el Gobierno posee la capacidad y la confianza suficiente para controlar la expansión del nuevo coronavirus. Por último, llamó a aumentar la cooperación ciudadana y a confiar en los esfuerzos del Gobierno, de las autoridades regionales y de los profesionales sanitarios para vencer al coronavirus.
Hasta las 5 pm del domingo 23 Corea registra un total de 602 personas infectadas y cinco muertos por COVID-19.