Hasta las 00:00 horas del lunes 30, Corea del Sur acumula 9.661 casos de COVID-19, al añadir 78 nuevos respecto al día anterior. Las muertes ascienden a 158 tras fallecer seis pacientes más el domingo 29, mientras que 5.228 personas han sido dadas de alta. Así, la mortalidad del coronavirus en Corea se sitúa en el 1,64%.
En cuanto a los 78 nuevos casos, destaca que en controles sanitarios y de entrada al país detectaron 13, que a su vez contagiaron a otras 16 personas. Este dato refleja un aumento en el número de casos de coronavirus que llegan del extranjero, factor que ha obligado al Gobierno a reforzar las restricciones.
Específicamente, las autoridades impondrán desde el 1 de abril un aislamiento domiciliario de dos semanas a todos los que ingresen a territorio surcoreano de otros países, al margen de la nacionalidad, procedencia o duración de su estancia en el exterior. Solo los visitantes con autorización previa, o que lleguen a Corea con fines diplomáticos, académicos o públicos, estarán exentos de esta restricción.
En tanto, aquellos que no tengan dónde pasar el aislamiento, serán derivados a instalaciones de cuarentena habilitadas por las autoridades y deberán cubrir todos los gastos de alojamiento.
Quienes no acaten esta medida pueden enfrentarse a penas de hasta un año de prisión y multas de hasta 10 millones de wones, en el caso de los surcoreanos. Los extranjeros, por su parte, podrán ser expulsados del país o directamente vetados a entrar en Corea del Sur.