El miércoles 1 los nuevos casos de COVID-19 superaron por segundo día consecutivo los cincuenta, elevando el nerviosismo entre la población ante una posible segunda ola de contagios en el país.
Específicamente, durante el miércoles se detectaron 54 casos, 44 domésticos y diez importados, acumulando Corea del Sur hasta las 00:00 horas del jueves 2 de julio, 12.904 casos. Las zonas más afectadas por ahora son Seúl y alrededores, donde continúan brotando contagios en pequeños colectivos, así como Gwangju, ciudad que el miércoles reportó 22 nuevos casos ligados a comunidades religiosas.
En este ambiente, el Ayuntamiento seulita prohibió la marcha que la Confederación Coreana de Sindicatos Industriales planeaba organizar el día 4, con un número previsto de 50.000 participantes. Las autoridades municipales argumentaron que la medida considera las dificultades reales de respetar las pautas de distanciamiento social en congregaciones de tal magnitud.
Además, recomendaron a la población evitar reuniones o eventos que impidan mantener las pautas sanitarias contra el COVID-19.