El Comando de las Fuerzas de Estados Unidos en Corea del Sur ha urgido a sus tropas a respetar las pautas sanitarias del Gobierno surcoreano, tras los recientes disturbios causado por soldados estadounidenses en la playa de Haeundae, en Busan.
Autoridades militares estadounidenses dieron a conocer el miércoles 15 en su cuenta oficial de redes sociales que el Gobierno surcoreano estableció una serie de pautas sanitarias ante la propagación del COVID-19 y que todos los efectivos estadounidenses deben acatarlas.
Recordó pautas como mantener una distancia mínima de dos metros con otras personas y llevar siempre mascarillas, máxime cuando no sea posible guardar esa distancia, como en espacios públicos o restaurantes. También recordó que no deben escupir, comer ni beber en las playas, al tiempo de evitar saludarse con la mano, cantar o gritar, al dispersar saliva, y lavarse las manos frecuentemente.
El pasado 4 de julio, Día de la Independencia en Estados Unidos, las tropas estadounidenses estacionadas en Corea del Sur provocaron diversos altercados en la localidad de Busan, causando disturbios, alteración del orden público y hasta pequeños incendios, atemorizando a los residentes de la zona, principalmente en las proximidades de la playa de Haeundae.