El pleno de la Asamblea Nacional aprobó, la noche del martes 22, el nuevo presupuesto complementario, que viene a ser ya el cuarto en lo que va de año contra la pandemia del COVID-19. Es la primera vez desde 1961, en casi seis décadas, que Corea del Sur asigna gastos adicionales en cuatro ocasiones en un mismo año, aparte de los presupuestos del Estado fijados para el correspondiente ejercicio fiscal. 

En el pleno parlamentario, el nuevo presupuesto suplementario fue ratificado con 272 votos a favor de los 282 diputados presentes, uno en contra y nueve abstenciones, a 11 días de llegar el proyecto a la cámara legislativa. 

De los gastos establecidos, la mitad se destinará para apoyar a ciudadanos con negocio propio y micro y pequeños comerciantes, que representan uno de los grupos más afectados por la crisis del coronavirus y las reforzadas pautas de distanciamiento social, las cuales inevitablemente ralentizaron la actividad socioeconómica en el país. 

Por ejemplo, propietarios de negocios cuyas ventas anuales no superan 400 millones de wones e incluso mermaron tras el repunte del COVID-19, serán beneficiarios de un subsidio básico de un millón de wones. Sin embargo, la ayuda será mayor para aquellos locales cuya operación se vio limitada o suspendida por las endurecidas pautas de distanciamiento social, como los restaurantes y otros establecimientos que tuvieron que cerrar a las 9:00 de la noche bajo medidas de nivel 2.5, los cuales percibirán 1,5 millones de wones; y aquellos que permanecieron cerrados, como los cibercafés, academias privadas y salas de estudios, que recibirán 2 millones de wones. 

La ayuda para gastos de teléfono e Internet, que fue un punto de controversia, será repartida a ciudadanos de entre 16 y 34 años y mayores de 65, en lugar de a toda persona mayor de trece como establecía la propuesta inicial del Gobierno. En cambio, fue ampliada la subvención por cuidado de hijos para cubrir hasta familias con estudiantes de secundaria, así como el servicio de vacunación gratuita contra gripe estacional, incluyendo 1.050.000 destinatarios más.

Asimismo, el nuevo presupuesto complementario asigna un gasto de 183.900 millones de wones para vacunas contra COVID-19 para 10.370.000 habitantes.