El COVID-19 derivó en la pérdida de más de 270.000 empleos en noviembre, a nivel interanual, manteniendo la tendencia a la baja por noveno mes consecutivo. 

Según la Oficina Nacional de Estadística el mes pasado Corea registró 27.241.000 personas activas, 273.000 menos que hace un año. Así, el empleo muestra el periodo más largo a la baja, desde los dieciséis meses seguidos que encadenó entre enero de 1998 y abril de 1999, tras la crisis financiera de 1997. No obstante, el margen de descenso se redujo al relajar las pautas de distancia social a Nivel 1 en octubre. 

Por edades, el empleo aumentó entre los mayores de sesenta, pero bajó en otros grupos de edad, como veinteañeros y aquellos entre 30 y 39 años.

Por sectores, el principal descenso afectó al sector manufacturero, hostelería y ventas mayoristas y minoristas, mientras que en el sector público, salud y bienestar social y en construcción, el empleo mejoró. 

En tanto, el número de desempleados registró en noviembre un total de 967.000 personas, 101.000 más a nivel interanual, situando la tasa de paro en un 3,45%, 0,3 puntos más que el año anterior y el mayor nivel registrado en un mes de noviembre desde 2011.