El ministro de Exteriores Chung Eui Yong anunció el lunes 19 que no se opondrá al vertido de aguas radiactivas por parte de Japón, si cumple las normas de la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Durante la interpelación parlamentaria al Gobierno, el canciller detalló los tres requisitos de Seúl a Tokio: uno, que Japón presente suficientes fundamentos científicos y comparta información con transparencia sobre el plan de vertido, dos, que Tokio ofrezca explicaciones al respecto a los países vecinos, y tres, que expertos surcoreanos participen en los procesos de verificación de la OIEA.
En cuanto a la diferencia de posturas entre Corea del Sur y Estados Unidos al respecto, Chung sostuvo que si bien las recientes declaraciones de varios altos cargos de Washington hacen ver que ambos países tiene opiniones distintas, en el fondo defienden la misma postura: que el plan de vertido de aguas radiactivas sea considerado viable y acreditado por la OIEA.
El ministro de Exteriores adelantó que el Gobierno surcoreano valora diversas contramedidas en caso de que Japón no cumpla fielmente con sus obligaciones, en base al Derecho del Mar de Naciones Unidas o a las leyes consuetudinarias internacionales, y no descarta iniciar procedimientos juridicos.