Un grupo formado por los organizadores de los once principales festivales de cine de Corea del Sur, incluyendo el de Festival de Busan y el de Jeonju, emitieron el martes 20 un comunicado apoyando la valiente lucha y la firme resistencia del pueblo y del sector cinematográfico birmano.
Hicieron un llamamiento al Ejército de Myanmar a frenar la masacre de inocentes civiles, al tiempo de resaltar la activa participación del sector cinematográfico de ese país en el movimiento ciudadano que busca restaurar la democracia, y defender la libertad y los derechos humanos. Los cineastas solicitaron vigorosamente a los líderes militares dejen de limitar, controlar y censurar el arte.
Los organizadores de festivales de cine surcoreanos expresaron su firme apoyo a los birmanos, y aprovecharon el comunicado como punto de partida para crear una alianza en defensa de la autonomía artístico-cultural, la libertad de expresión y los derechos civiles de las minorías.