Los restos mortales de 68 soldados surcoreanos caídos en la Guerra de Corea (1950-1953) que hasta la fecha yacían en un cementerio de Hawái, llegaron al país en la noche del día 23 desde Honolulú, Hawái.
Tras viajar a Estados Unidos para asistir a la Asamblea General de la ONU, el presidente Moon hizo escala en Hawái, donde participó en un homenaje a los caídos en la Guerra de Corea.
Además, en la noche del jueves 24, al volver al país, presidió otra ceremonia en la Base Aérea de Seúl en honor a los soldados repatriados, a la que acudieron una veintena de personas, incluidos la primera dama, el ministro de Defensa Suh Wook, el ministro de Asuntos de Patriotas y Veteranos Hwang Ki Chul, y ocho familiares de los soldados identificados.
La ceremonia se llevó a cabo con los máximos honores para honrar a los caídos, cuyos restos mortales serán enterrados próximamente en el Cementerio Nacional de Seúl.
Los restos de dos soldados fueron identificados como Kim Seok Joo y Jung Hwan Jo, y sirvieron en el 32º Regimiento de la 7ª División de Infantería de EE. UU., bajo el Programa de Tropas de Refuerzo Surcoreanas para el Ejército de los Estados Unidos (KATUSA). Ambos fallecieron en la batalla de la presa de Chosin, en 1950.