Washington mantiene una postura cautelosa sobre la propuesta de Seúl de declarar oficialmente el fin de la Guerra de Corea.

Durante una rueda de prensa ofrecida el martes 26, el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, fue preguntado si Washington apoya esa iniciativa de Seúl o si cree que serviría como catalizador para reanudar el diálogo con Corea del Norte. 

Respondió que los aliados pueden tener "perspectivas un tanto distintas" sobre la secuencia precisa, el momento o las condiciones para declarar formalmente el fin de la guerra, pese a estar fuertemente alineados en la estrategia central. 

En tanto, el relator especial de la ONU sobre derechos humanos norcoreanos, Tomás Ojea Quintana, comentó en una entrevista con KBS que la pandemia del COVID-19 no puede justificar el aislamiento de Corea del Norte, y señaló la necesidad de una propuesta creativa para reanudar el diálogo, como una relajación parcial de sanciones, para mejorar la crisis alimentaria del régimen norcoreano. 

También enfatizó que la ayuda humanitaria no debe depender de las condiciones políticas bajo ninguna circunstancia.