Kim Gunn, nuevo delegado de Seúl para el diálogo nuclear con Corea del Norte, mantuvo el lunes 16 la primera conversación telefónica con su homólogo estadounidense Sung Kim.
Ambos hablaron de la propagación del COVID-19 en Corea del Norte y también sobre el programa nuclear y balístico del régimen.
Según informó el Ministerio de Exteriores, ambos funcionarios mostraron inquietud por la situación del coronavirus en Corea del Norte, y acordaron mantenerse en estrecho contacto, tanto a nivel bilateral como con la comunidad internacional, para ofrecer ayuda humanitaria a Pyongyang.
También intercambiaron opiniones sobre el posible riesgo de una nueva prueba nuclear norcoreana, reiterando la importancia de mantener un nivel óptimo de preparación de las tropas aliadas y de reforzar la cooperación para lograr una respuesta unánime de la comunidad internacional ante el problema nuclear.
Finalmente, comentaron que Seúl y Washington coordinan políticas hacia Corea del Norte de cara a la inminente visita del presidente Joe Biden a Corea, y acordaron trabajar por estrechar aún más la alianza a futuro.