Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, ha explicado que Washington debe mantener la presión contra Corea del Norte mientras Pyongyang siga negándose a dialogar.
A bordo del Air Force One, de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, de camino a Corea del Sur, Sullivan señaló que desde que Joe Biden asumió la presidencia Washington ha venido impulsando el diálogo con Pyongyang por distintos canales, además de proponer varias medidas de desnuclearización, incluido el método "acción-acción", un diálogo directo entre Washington y Pyongyang, o un diálogo con terceros, incluyendo a China y otros países.
Pero al no obtener respuesta alguna por parte del régimen, Estados Unidos no tiene más remedio que mantener la presión y una línea estricta contra Pyongyang, además de prepararse ante posibles contingencias como nuevos ensayos balísticos o nucleares del régimen.
Explicó que si Corea del Norte acomete nuevas provocaciones durante la visita de Biden a Corea del Sur y Japón, Estados Unidos responderá con contundentes medidas junto con sus aliados, además de reforzar la presencia en Asia-Pacífico.