El jefe de la Guardia Costera, Jeong Bong Hun, y otros ocho altos funcionarios presentaron una renuncia en bloque, ante la polémica por el caso del funcionario asesinado por soldados norcoreanos en 2020.
Según dio a conocer la Guardia Costera, Jeong y otros altos cargos renunciaron el viernes 24 asumiendo su responsabilidad, tras ofrecer una sincera disculpa a los ciudadanos y a los familiares de la víctima, por los malentendidos generados.
La semana pasada, la Guardia Costera y el Ministerio de Defensa anunciaron que, tras largas investigaciones, no han podido comprobar que el funcionario fuera asesinado mientras intentaba desertar a Corea del Norte, revocando el anuncio efectuado hace dos años, cuando el Ejecutivo de Moon Jae In cerró el caso alegando que murió por los disparos de agentes norcoreanos mientras intentaba cruzar a Corea del Norte, agobiado por deudas de juego.