El 4 de julio Corea del Sur reportó 6.253 nuevos casos de COVID-19, casi 3.000 más que hace una semana. El volumen es además, el mayor registrado en un lunes durante las últimas seis semanas.
Así, las autoridades advierten de un repunte -aunque leve- de contagios tras varios meses de remitir el ritmo de propagación luego que los casos alcanzaran niveles máximos en marzo por la variante ómicron.
Actualmente hay 56 pacientes en unidades de cuidado intensivo, tres más que el día anterior y las muertes ascienden a 24.574 tras fallecer cuatro personas el domingo 3, situando la mortandad por coronavirus en el país en el 0,13%.
Entre los nuevos casos reportados el lunes 4, un 12,3% son ciudadanos mayores de sesenta, clasificados como de alto riesgo, mientras que un 24,4% son menores de dieciocho.