El departamento de Estado de Estados Unidos sigue de cerca los movimientos de Corea del Norte y asegura que está preparado para adoptar medidas adicionales en respuesta a las provocaciones balísticas del régimen de Kim Jong Un. 

Vedant Patel, portavoz adjunto de la cartera estadounidense, condenó el jueves 6 los recientes lanzamientos de misiles balísticos de Pyongyang, que calificó de "amenaza directa hacia los países próximos a Corea del Norte y hacia toda la comunidad internacional". 

También subrayó que hay muchos mecanismos, incluidas las sanciones, para hacer que el régimen norcoreano pague por sus actos, y enfatizó que Washington sigue atentamente los movimientos del Norte y valora adoptar medidas adicionales. 
 
Pese a todo, hizo un llamado al diálogo, afirmando que su país aún sigue abierto a negociar sin condiciones con Corea del Norte.

Por su parte Patrick Ryder, portavoz del Pentágono, afirmó el jueves 6 en sesión informativa que el portaaviones estadounidense Ronald Reagan participó en un ejercicio de defensa conjunto en el Mar del Este, junto con destructores surcoreanos y japoneses, en respuesta a los recientes lanzamientos de misiles de Pyongyang.  

Destacó que esos entrenamientos reflejan claramente la unidad entre los aliados, al tiempo de mejorar la interoperabilidad de sus fuerzas armadas. También reiteró que Washington está preparado para responder adecuadamente ante cualquier provocación norcoreana, siempre en estrecha consulta con socios y aliados, además de expresar su compromiso por mantener la región del Indo-Pacífico como una zona libre y abierta, y de garantizar la paz y la estabilidad en la región.