El jueves 24 por la noche los hinchas de la selección acudieron a la Plaza de Gwanghwamun para animar a Corea del Sur en el partido contra Uruguay. Pese a la multitud, los eventos transcurrieron de forma ordenada y sin incidentes.
Según informaron la Ciudad Metropolitana de Seúl y la Policía, unos 26 mil ciudadanos se congregaron en la Plaza de Gwanghwamun, casi el triple de lo estimado por las autoridades.
Inicialmente la organización estimo que acudirían unas 8 mil personas y habilitaron cinco secciones en la plaza para acoger a los hinchas, pero al llegar más ciudadanos, la policía retiró rápidamente algunas de las vallas que separaban las secciones y dejaron más espacio limitando el tráfico en la avenida.
Para evitar incidentes como la reciente tragedia de Itaewon, entre policías, personal del ayuntamiento Seúl y los Diablos Rojos movilizaron unas 1.400 personas para velar por la seguridad y mantener el orden durante el evento.