Desde hace tres días persiste el enfrentamiento entre el Ayuntamiento capitalino y los familiares de las víctimas de la tragedia de Itaewon por el altar instalado en la Plaza de Seúl en homenaje a los fallecidos.
 
La Municipalidad exige desmantelar el altar y dio plazo hasta la 1:00 de la tarde del lunes 6, advirtiendo que si no acatan la orden adoptará medidas, mientras que familiares y activistas civiles custodian el altar 24 horas al día, exigiendo su derecho a rendir homenaje a las víctimas. 

Dicho altar fue instalado cuatro días antes de cumplirse cien días de la tragedia para conmemorar a las víctimas. El Ayuntamiento explica que las normas sobre el uso de la Plaza de Seúl exige una solicitud y un permiso previo para ese tipo de instalaciones en la plaza y al no haberlo, podrían adoptar medidas legales. 

En la misma línea, el Gobierno Metropolitano de Seúl declaró oficialmente el domingo 5 que el altar debe retirarse, proponiendo como alternativa crear un espacio de tributo en la estación de metro de Noksapyeong, sugerencia que los familiares de las víctimas rechazan, ante la dificultad de habilitar ese espacio en el subsuelo.