Al remitir el frío emerge como problema la mala calidad del aire, obligando el lunes 6 a activar medidas de emergencia contra micropolvo ante los elevados niveles de PM2,5 o partículas de hasta 2,5 micrómetros de diámetro, sobre todo en la zona centro y en el interior de la zona sur. 

Por el momento activaron medidas anti polución en Seúl, en Incheon, en la provincia de Gyeonggi y en Sejong a las 6:00 de la mañana del lunes 6, y se mantendrán hasta las 9:00 de la noche. 

Esto implica que los vehículos clasificados como Emisor de Contaminantes Grado 5 no pueden circular en dichas zona. Además, aquellos lugares catalogados como productores de esmog -como centros de incineración de residuos- deben reducir el horario de operación y aumentar la frecuencia de limpiezas con agua. 

Un Grado 5 de emisión de contaminantes incluye, por ejemplo, los coches compactos de tamaño mediano y de carga de gasolina y de gas que emiten más de 5,3 gramos de óxido de nitrógeno o hidrocarburos por kilómetro recorrido, o aquellos diésel que superen 0,560 gramos por kilómetro. En el caso de los sedanes y autos de gran tamaño, así como de camiones de gasolina y de gas -incluidos los híbridos-, se consideran de Grado 5 aquellos que emitan más de 5,5 gramos de óxidos de nitrógeno o más de 1,2 grados de hidrocarburos por kilovatio y hora.

En algunos puntos del área metropolitana de Seúl tuvieron que activar hasta la alerta por PM2,5. Entre ellos figuran Yongin y otras localidades al sur de Gyeonggi y al noroeste de la capital, que activaron la alerta a las 10, medidas que a las 11 de la mañana, tan solo una hora más tarde, fueron activadas al norte de Gyeonggi, afectando a localidades como Gimpo, entre otras. 

Se prevé que la contaminación por micropolvos persistirá ante el estancamiento de las corrientes, y el esmog continuará el martes 7 en las zonas centro y suroeste, mientras que en la costa noreste y la zona centro-oriental, las partículas en suspensión aumentarán pasajeramente a primera hora.

El empeoramiento de la calidad del aire se atribuye en parte al esmog generado en el país, que se acumula en la atmósfera al debilitarse las corrientes de aire, a cuyo efecto se suma la llegada de contaminantes procedentes del extranjero, concretamente de China.

Ante este fenómeno, las autoridades recomiendan a la población, especialmente a aquellos con enfermedades respiratorias u otras patologías previas, evitar salir de casa o realizar actividades al aire libre en la medida de lo posible.