Seúl considera que ha podido sortear el peor impacto de las medidas proteccionistas de la Ley de Ciencias y Chips de Estados Unidos, que limita la inversión en China por parte de las empresas que acceden a los incentivos de Washington al sector de semiconductores, pues según el borrador del reglamento podrán incluso ampliar la producción en China.
El Ministerio de Comercio, Industria y Energía explicó el miércoles 22 que dicho borrador deja cierto margen a fabricantes surcoreanos de chips como Samsung y SK Hynix en cuanto a mantener sus plantas de producción en China y ampliar la producción y el desarrollo tecnológico en el gigante asiático.
Según anunció el Departamento de Comercio estadounidense, el reglamento impone un límite del 5% a la ampliación de fabricación de semiconductores en los llamados "países de interés", como China y Rusia, durante diez años a los beneficiarios de la Ley de Chips.