El martes 5, la Basílica de San Pedro del Vaticano inauguró una estatua del primer sacerdote católico de Corea, San Andrés Kim Dae Gon.

La estatua, que representa al religioso con la vestimenta tradicional coreana, fue ubicada en la pared exterior derecha de la Basílica de San Pedro, cerca de la salida de las Catacumbas del Vaticano y lugar donde yacen los restos de varios papas, siendo la primera vez en la historia católica que erigen una estatua de un santo oriental en un nicho exterior de la Basílica de San Pedro. 

La ceremonia de consagración del monumento se llevará a cabo el 16 de septiembre en la Basílica de San Pedro, tras celebrar una misa que oficiará el cardenal Lázaro Yoo. 

Nacido en 1821 en Solmoe, provincia de Chungcheong del Sur, Kim Tae Gon se convirtió en el primer sacerdote católico de Corea al ser ordenado en agosto de 1845. Cuando en la corte de Joseon los católicos eran perseguidos con vehemencia, no cejó en empeño de evangelizar y promulgar la religión católica hasta que fue arrestado y decapitado en septiembre de 1846.

En 1984 fue canonizado por el papa Juan Pablo II.