El Gobierno estima que en 2023 recaudarán en impuestos unos 60 billones de wones menos de lo previsto, al empeorar el rendimiento de las empresas y la contracción del mercado inmobiliario, factores que resultarán en un menos ingresos por el impuesto sobre sociedades y cesión de derechos.
Inicialmente, la estimación tributaria del Gobierno para 2023 fue de 400,5 billones de wones, cifra que ha rectificado en un 15% menos hasta 59,1 billones de wones, la mayor diferencia de la historia.
El Ejecutivo atribuye esa diferencia a la ralentización del mercado de chips y al descenso de la economía en general, que este año harán disminuir un 24% en la recaudación del impuesto sobre sociedades respecto al pronóstico inicial.
En tanto, la contracción del mercado inmobiliario derivará en un 41% menos de impuesto sobre cesión de derechos.
Para paliar la diferencia, recurrirán al superávit presupuestario de 2022 y a fondos públicos como el de Estabilización Cambiaria.