Paul LaCamera, comandante de las fuerzas estadounidenses estacionadas en Corea del Sur, afirmó el jueves 21 que el traspaso del mando militar en tiempos de guerra a Seúl avanza según el calendario previsto.
Durante una audiencia del Comité de Servicios Armados del Senado estadounidense, LaCamera aclaró que la creciente amenaza de seguridad no afecta al traspaso del mando operativo, proceso que sigue unas concidiones y requisitos a cumplir, y destacó los avances en ese sentido.
En 2014, Corea del Sur y Estados Unidos acordaron traspasar el mando militar en tiempos de guerra cuando Corea del Sur lograra las capacidades militares básicas para contrarrestar la amenaza balístico-nuclear de Corea del Norte, y mantener un entorno seguro en la península y la región.
No obstante, la acelerada evolución de la capacidad nuclear de Corea del Norte y los conflictos globales, generan dudas sobre la posibilidad de agilizar el traspaso.