El diario Yomiuri publicó el martes 9 que la cantidad de residuos de agua contaminada ("agua tratada" según el gobierno japonés) de la planta nuclear de Fukushima, ha disminuido en 19.000 toneladas desde agosto del año pasado, tras cuatro descargas al océano.
Según informó Tokyo Electric Power Company (TEPCO), empresa a cargo de la planta nuclear, hasta el 4 de abril han vertido al océano un total de 1.326.000 toneladas, unas 19.000 toneladas menos que en agosto de 2023.
Aunque la descarga se calcula en 31.000 toneladas, la planta genera unas 80 toneladas diarias, por lo que el remanente real es superior a la cantidad liberada.
TEPCO comenzará a desmantelar los tanques vacíos antes de marzo del próximo año, y su plan es liberar unas 54.600 toneladas de agua contaminada durante 2024 en siete descargas, programadas entre abril y marzo de 2025.
Su objetivo e desmantelar la planta nuclear de Fukushima para el año 2051, 40 años después del accidente. Sin embargo, dichas obras por el momento plantean dudas por la dificultad de extraer el combustible nuclear.