A medida que aumenta la demanda de armamento fabricado por Corea del Sur, surge como un reto la elevada dependencia del sector de materiales importados, sobre todo en suministro de materiales clave para fabricar equipos militares, como aleaciones de titanio o resistentes a elevadas temperaturas.

Así lo refleja un informe del Instituto Coreano de Economía Industrial y Comercio, pues advierte que cada vez los fabricantes de armas afrontan más problemas para asegurar una red estable de suministro. Como ejemplo, menciona el ratio de importaciones respecto al otal de los diez materiales más usados por el sector defensa, enfatizando que alcanzó un 78,9% en 2022. 

La dependencia del exterior destaca especialmente en el suministro de metales, pues las aleaciones de magnesio y resistentes a elevadas temperaturas que usan los fabricantes de equipos militares surcoreanos son cien por cien importadas, mientras que un 99,8% de aleaciones de titanio y de otros metales, como níquel y cobalto, y un 94,9% de las de aluminio proceden de otros países. 

Según el informe, aparte del mencionado otros retos que amenazan la estabilidad en el suministro de materiales para el sector defensa son las consecuencias de la pandemia, que aún persisten, la prolongación de las "dos guerras" en Europa y Oriente Medio, los desastres naturales y la división de la cadena global de suministro.