El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, se ha comprometido a esforzarse por reanudar el diálogo nuclear con Corea del Norte y dotarlo de carácter sustancial.
Así lo expresó el jueves 9, hora local, durante una videoconferencia con la prensa, al afirmar que el arsenal balístico y nuclear de Corea del Norte supone una "amenaza estratégica" y afecta tanto a Corea del Sur, como a China y otros países del Nordeste Asiático.
Resaltó que Estados Unidos se toma en serio la obligación de reducir la proliferación nuclear, insinuando que Washington mantiene el compromiso de resolver el problema norcoreano a través del diálogo y las negociaciones.
Al ser preguntado sobre una posible tercera cumbre entre el presidente estadounidense Donald Trump y el líder norcoreano Kim Jong Un, Pompeo se abstuvo de concretar, pero expresó su deseo de proseguir con reuniones entre ambos líderes como la primera de Singapur, en 2018.
Agregó que Estados Unidos ansía mantener el diálogo con Corea del Norte incluyendo, de ser necesario, las negociaciones a nivel de trabajo entre funcionarios de alto rango.