Baek Nam Ki, un agricultor de 69 años que resultó herido por la policía en una manifestación el año pasado, falleció el lunes 25 a las 1:58 horas en el Hospital de la Universidad Nacional de Seúl, por insuficiencia renal aguda. 

La familia y otros integrantes de sociedades civiles, quienes ya estaban al tanto de que el fin de semana sería crítico para el paciente, acompañaban al agricultor desde entonces. 

Baek perdió la conciencia tras ser alcanzado por una manguera de agua de efectivos policiales durante una manifestación el pasado noviembre. Tras el suceso, algunas sociedades civiles acusaron al entonces jefe de la Policía Nacional, Kang Shin Myung, y a otros 7 policías, de asesinato frustrado, al tiempo de reclamar al Estado y al jefe de la Policía una compensación de 240 millones de wones. Al respecto, la Policía negó haber hecho uso excesivo de la fuerza durante la manifestación. 

Por otra parte, el Tribunal del Distrito Central de Seúl ha rechazado la petición de la Fiscalía de realizar una autopsia al fallecido.