El Ministerio de Océanos y Pesca dio a conocer el lunes 10 haber detectado daños en el casco del Sewol, que finalmente fue trasladado a tierra firme el domingo 9. Principalmente, el ferri presenta deformaciones en la popa y la proa, que se estima derivan del proceso de reflotar el barco, bastante diezmado ya después de tres años sumergido en aguas marinas.
En este contexto, y considerando otros daños que pudiera sufrir la embarcación, las autoridades han decidido mantener el barco en su lugar actual y no moverlo más. Ahora el Sewol se halla a unos 40 metros del muelle, punto al que llevarán el soporte del barco semisumergible que lo trajo a puerto, y sobre el que será afianzado de nuevo.
Esta operación se desarrollará hasta la mañana del martes 11, para luego proceder a limpiar y fumigar el buque, al tiempo de realizar los exámenes de seguridad necesarios, antes de iniciar el registro interior del casco.