Diez desertores norcoreanos fueron arrestados por la Policía en China y se enfrentan a una posible repatriación.
Según informan, la policía de China detuvo el sábado 4 a un grupo de ciudadanos norteños, incluido un niño de tres años, en una casa en Shenyang, China; así como a un empleado de la agencia que ayudó a organizar la deserción. Los norcoreanos planeaban llegar a Corea del Sur.
Los familiares de los detenidos, que anteriormente lograron escaparse del país norteño y se establecieron en el Sur, pidieron al Consulado General de Corea del Sur en Shenyang ayuda para liberar a los desertores, alegando que serán sometidos a severos castigos en caso de ser deportados al Norte.
No en vano, el Consulado surcoreano solicitó a la policía china que investigue y maneje el caso desde una perspectiva humanitaria, para evitar su deportación.