El Gobierno surcoreano anunció que a partir del próximo enero aplicará nuevas medidas para evaluar con más rigor los ingresos del prestatario y medir estrictamente la capacidad de endeudamiento para préstamos hipotecarios. 

La Comisión de Servicios Financieros de Corea del Sur anunció el lunes 27 un paquete de medidas para ajustar las normas de la hipoteca y frenar las crecientes deudas de los hogares. 

Las medidas serán aplicadas a los préstamos para comprar viviendas de las "zonas especulativas" de Seúl y sus aledaños, designadas por el Gobierno. Así, los bancos evaluarán con mayor precisión la capacidad de pago de un prestatario, lo que impedirá que los ciudadanos compren viviendas con grandes hipotecas. Revisarán los ingresos de los últimos dos años del solicitante, en vez del último como sucede hasta la fecha, así como el uso que hace de sus tarjetas de crédito. 

El Gobierno estima que a través de las nuevas medidas, el crecimiento de los préstamos hipotecarios para la compra de viviendas podría reducirse en un 0,16%. 

Mientras, la tasa de servicio de deuda (DSR), que calificará la capacidad del prestatario para afrontar tanto el pago de la hipoteca como de otros préstamos, será introducida por los bancos a partir del cuarto trimestre del próximo año.