La ex presidenta de Corea del Sur, Park Geun Hye, quien fue removida del cargo por consentir la injerencia de su confidente Choi Soon Sil en asuntos gubernamentales, recepción de soborno y abuso de poder, entre otros, fue sentenciada el viernes 6 de abril a 24 años de prisión.
La división 22 de lo penal del Tribunal del Distrito Central de Seúl reconoció la culpabilidad de Park en 16 de los 18 cargos imputados, fijando una condena de 24 años de cárcel y una multa penal de 18.000 millones de wones, en primera instancia, rebajando ligeramente los 30 años de prisión y la multa 118.500 millones de wones requeridos por la Fiscalía. En caso de no abonar la multa, deberá realizar 3 años de servicios sociales.
La Justicia considera que la acusada abusó del poder conferido por el pueblo y provocó grandes contratiempos en la gestión gubernamental, hechos que finalmente condujeron a la remoción de un jefe de Estado en activo por primera vez en la historia constitucional de Corea. Así, el tribunal consideró a Park como la principal culpable del caso, al incumplir su responsabilidad como presidenta de la Nación.
La sentencia en primera instancia fue emitida 354 días después de comenzar el juicio contra Park el 17 de abril de 2017. El día 6 de abril, la ex mandataria se negó una vez más a comparecer ante el Tribunal para escuchar su sentencia.