Los coreanos reclutados forzosamente como obreros por Japón durante la era colonial han ganado la demanda de indemnización por daños y perjuicios que presentaron contra la empresa Mitsubishi. 

El dictamen final fue emitido el jueves 29 por el Tribunal Supremo de Corea del Sur, y concluye que el acuerdo sobre reclamación de compensaciones firmado entre los gobiernos de Seúl y Tokio en 1965 no limita el derecho particular de las víctimas a solicitar una indemnización. 

Específicamente, el Tribunal Supremo falló a favor del demandante en los juicios de revisión civil iniciados a partir de la petición de reparaciones presentada por cuatro víctimas femeninas más un familiar de otra ya fallecida contra Mitsubishi, por movilizarlas forzosamente para cubrir la falta de mano de obra; y también otra de seis hombres también explotados por dicha firma japonesa. 

El dictamen fija una indemnización de entre 100 y 150 millones de wones por persona para las mujeres, y de 80 millones de wones por persona en el caso de los hombres.