El Tribunal Regional Central de Seúl emitió el jueves 24 la orden de detención contra el ex presidente del Tribunal Supremo, Yang Sung Tae, siendo la primera vez en la historia de Corea que la máxima autoridad del Poder Judicial del país se enfrenta a prisión provisional.
El juez a cargo argumentó que gran parte de las sospechas que recaen sobre Yang son graves y fundadas, además de existir riesgo de destrucción de pruebas, considerando la influencia del sospechoso y la relación entre los implicados en el caso.
Algunos de los hechos que involucran al ex responsable del Supremo son injerencia en juicios sobre víctimas del reclutamiento forzoso cometido durante la era colonial japonesa y recopilación ilegal de datos internos del Tribunal Constitucional. También es sospechoso de ordenar vigilancia secreta a jueces y de elaborar una lista de funcionarios judiciales no simpatizantes con el Gobierno, así como de acumular fondos ilícitos con el presupuesto administrativo de la Oficina de Relaciones Públicas del Tribunal Supremo.
La orden de detención contra Yang fue presentada el 18 de enero por la Fiscalía, en base a más de 40 cargos como abuso de autoridad, negligencia, injerencia en la función pública en base a relaciones jerárquicas, filtración de secretos y falsificación de documentos oficiales.