Tras finalizar una inspección sanitaria en Corea del Norte, UNICEF ha confirmado la gravedad de problemas de contaminación del agua y patologías relacionadas, como la diarrea.
Al respecto, UNICEF denunció en un informe sobre agua, saneamiento e higiene, que el 39% de los norcoreanos no tiene acceso a agua potable limpia y segura, fenómeno que aumenta en las zonas rurales, donde esa tasa asciende al 56%.
Dicha entidad señala que cada 1 de 10 niños norcoreanos sufre diarrea por ingerir agua contaminada; además de ser acuciante la propagación de enfermedades infecciosas como malaria y hepatitis B.