Mientras Japón intenta excluir a Corea del Sur de su lista de "países blancos", Seúl ha constatado la gravedad del tema, advirtiendo que podría socavar las relaciones económicas entre ambos países, y también la cooperación en materia de seguridad en el Nordeste Asiático.  

Durante una sesión informativa ofrecida el miércoles 24, Sung Yun Mo, ministro de Industria, Comercio y Energía, afirmó que acababa de entregar un escrito de Seúl sobre la propuesta de enmienda al Decreto sobre Control de Exportaciones de Japón, cuya presentación fue oficialmente notificada ese mismo día por el Ministerio de Economía e Industria de Japón. 

Dicha reforma busca excluir a Corea de la lista de "países blancos" de Gobierno nipón, 15 años después de formar parte de dicha categoría.

Al respecto, el ministro de Industria explicó que la alegación de Japón sobre insuficiente control a la exportación de productos susceptibles de ser usados para fabricar armas deriva de una "falta de entendimiento" por parte de Tokio. 

A ese tenor, urgió a Tokio a levantar de inmediato las restricciones sobre exportaciones a Seúl, y a dar marcha tras a la propuesta de excluir a Corea del listado de países blancos.