El Tribunal Central del Distrito de Seúl dictaminó el martes 7 a favor de dos prisioneros de guerra que desertaron de Corea del Norte tras ser sometidos a trabajos forzosos, siendo el primer fallo de esta índole en la Justicia surcoreana.

Los demandantes reclaman una indemnización por daños y perjuicios contra el Estado norcoreano y contra Kim Jong Un. Se trata de dos hombres que fueron hechos prisioneros por Corea del Norte durante la guerra y fueron sometidos a trabajos forzosos por más de cincuenta años, hasta que lograron desertar tras cumplir setenta años.

Posteriormente, presentaron una demanda ante la Justicia de Corea del Sur y el juicio se desarrolló durante tres años y nueve meses, llegando a un dictamen a favor de la parte demandante. 

La sentencia estipula que en base a los daños y perjuicios ocasionados, el Estado y el líder norcoreano deben dar a cada demandante una indemnización de 21 millones de wones, aunque se considera que no tendrá cumplimiento práctico.

Así las cosas, los abogados de los demandantes anticiparon que solicitarán que el pago se haga a cargo de partidas que debieron ser enviadas a Corea del Norte, por ejemplo para la Televisión Central norcoreana, pero quedaron bloqueadas al impedir las sanciones internacionales emitir giros monetarios hacia el Norte.