El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, mantuvo el lunes 12 (hora local) una sesión virtual con 19 empresas tecnológicas para buscar respuesta a la escasez de chips que está generando problemas de producción.
En la sesión no solo participaron los principales fabricantes de chips, como Intel, Samsung Electrónica y Taiwan Semiconductors Manufacturing Company (TSMC), sino también empresas automovilísticas.
Biden expresó su voluntad de invertir más agresivamente en el sector de chips y baterías, argumentando que todos los países del mundo apuestan por una activa inversión en el sector.
Intel y TSMC, por su parte, se comprometieron a aumentar la inversión masiva en instalaciones, mientras que Samsung Electrónica planea invertir unos 20 billones de wones en el sector.
Pese a todo, la Casa Blanca señaló que difícilmente procederán a una desregulación del mercado de semiconductores a corto plazo.