El presidente Moon Jae In se reunió el domingo 10 con los representantes de los cinco principales partidos políticos en una cena organizada por la oficina presidencial, en agradecimiento por las condolencias mostradas el mes pasado al fallecer su madre. 

Durante el encuentro, que se prolongó a puerta cerrada por unas tres horas desde las 6 pm en la residencia presidencial, Moon propuso retomar las reuniones del grupo consultivo entre Ejecutivo, oficialismo y oposición para debatir las cuestiones relevantes prioritarias, que siguen paralizadas desde hace un año, propuesta a la que los líderes asistentes dieron su conformidad. 

Además, Moon hizo hincapié en la necesidad de lograr una cooperación suprapartidaria en temas como las restricciones comerciales de Japón contra Corea del Sur y el acuerdo de intercambio de información militar confidencial con Tokio, GSOMIA, que expira a final de mes. 

También urgió a la Asamblea Nacional a ampliar el sistema de redistribución del horario laboral y a la rápida aprobación de otros proyectos de ley relacionados con la economía. 

El dirigente surcoreano mostró su esperanza en que el Parlamento aborde la reforma electoral a través del diálogo, después de que el líder del partido conservador, Libertad Corea, y los responsables de los otros cuatro partidos que acudieron al encuentro, se enfrentaran verbalmente al mantener distintas posturas al respecto.