El miércoles 27 entró en vigor el uso obligatorio de mascarillas en todos los vuelos nacionales e internacionales, mientras que pasajeros y empleados de las aerolíneas ya están relativamente acostumbrados a una 'cultura sin contacto'.
Así, en la terminal de vuelos domésticos del Aeropuerto de Gimpo, la mayoría de los pasajeros se acercó el miércoles a las máquinas de auto check-in, y no a los mostradores con personas, para tramitar su embarque.
También pasaron por control automático de seguridad, que permite comprobar la identidad del viajero mediante las venas de la palma de la mano, sin necesidad de quitarse la mascarilla ni presentar documentos a un agente de migración.
En tanto, el Aeropuerto de Incheon ha comenzado a usar balanzas inteligentes, que no solo miden el tamaño y peso de las maletas, sino que también indican si son consideradas como equipaje de mano, minimizando el contacto o intercambio de palabras entre el personal de las aerolíneas y los pasajeros.