El domingo 1 de diciembre entraron en vigor las restricciones al uso de vehículos del periodo invernal, una medida contra el empeoramiento de la calidad del aire por partículas en suspensión que se mantendrá durante cuatro meses, hasta fines de marzo de 2020. 

Principalmente, prohibirán la circulación de vehículos con emisiones de quinto grado, para reducir los gases de escape en el centro de Seúl, designado como zona de transporte verde. 

El sistema nacional de clasificación medioambiental de coches clasifica como de quinto grado aquellos automóviles de gasolina o de gas que emiten más de 5,3 gramos de óxidos de nitrógeno y de hidrocarburos por kilómetro, y aquellos de diésel con emisiones superiores a 0,56 gramos por kilómetro. Los conductores que no respeten esta restricción, desde las 6:00 de la mañana hasta las 9:00 de la noche de lunes a domingo, serán sancionados con una multa de 250.000 wones. 

Las excepciones contemplan vehículos para discapacitados y de emergencias, así como aquellos para los que no existen aun un sistema adecuado de recirculación de gases de escape. 

El Ayuntamiento de Seúl anunció que, además de controlar más estrictamente la contaminación por tráfico, fomentará el uso de medios de transporte ecológicos, elevando el número de bicicletas públicas hasta 2.400 unidades, y el de estaciones de alquiler automático de las actuales 79 hasta 165.