El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha revisado a la baja sus previsiones de crecimiento para la economía mundial.
El martes 19 anunció una nueva previsión trimestral que refleja el aumento de la presión inflacionaria a nivel internacional y el impacto de la invasión rusa a Ucrania, entre otros factores.
El FMI estima que la economía global crecerá este año un 3,6%, un 0,8% menos que lo previsto en enero. También rebaja la previsión de crecimiento para Estados Unidos en 0,3 puntos porcentuales, en un 0,4% la de China y en 1,1 puntos porcentuales la de la Eurozona.
En cuanto a Corea del Sur, pronostica un crecimiento del 2,5% para 2022, un 0,5% menos que en enero.
La entidad subraya el empeoramiento en la cadena de suministro y el aumento de la inflación a nivel global por el impacto de la guerra en Ucrania. También apunta a un menor crecimiento global por las estrictas políticas monetarias de gasto público en cada vez más países, y por la desaceleración económica de China por la pandemia. En tanto, sugirió a los gobiernos adoptar medidas según cada país, recomendando controlar el flujo de divisas para hacer frente a la inflación, pero sin olvidar la recuperación económica.
Respecto a la inflación, el FMI elevó la perspectiva para Corea del Sur al 4% en 2022, con un aumento de 0,9 puntos porcentuales respecto al pronóstico anterior.