Lee Jae Yong, hasta ayer vicepresidente de Samsung Electronics, fue designado presidente del grupo el 27 de octubre. 

La Junta Directiva de Samsung Electronics aprobó el nombramiento de Lee como presidente ejecutivo de la compañía, considerando la incertidumbre global para los negocios, la necesidad de garantizar una gestión responsable y estabilidad comercial. 

El nombramiento llega tras diez años como vicepresidente de Samsung Electronics, y dos años después de fallecer su padre y expresidente del grupo, Lee Kun Hee.

Pese a que jurídicamente su nombramiento no precisaba el beneplácito de la Junta Directiva, se estima que siguió ese proceso para reforzar un liderazgo que escucha a la cúpula.

Durante la reunión convocada el martes 25 por el segundo aniversario de la muerte del fundador del grupo, su hijo Lee Jae Yong explicó que la compañía atraviesa momentos difíciles pues los últimos años no ha podido liderar nuevas industrias, enfatizando la importancia de prepararse y desarrollar capacidades para el futuro, sin temor a enfrentar retos o audaces decisiones. 

El flamante presidente de Samsung mantuvo el día 27 su agenda de actividades según lo previsto, sin realizar eventos ni anuncios sobre su nuevo cargo.

Actualmente, Lee está siendo juzgado por la polémica fusión de dos filiales de Samsung, estrategia que le permitió reforzar su control sobre el conglomerado en el año 2015, y caso por el que el mismo jueves tuvo que comparecer ante el Tribunal del Distrito Central de Seúl.

La batalla legal, aún en primeria instancia, podría llegar a la Corte Suprema, lo cual implica que el riesgo como propietario del grupo podría persistir durante años.