El miércoles 18, en su primer día en Davos, sede del Foro Económico Mundial, el presidente Yoon Suk Yeol mantuvo un encuentro con los responsables de algunas grandes firmas globales, a quienes solicitó un mayor interés en Corea como destino inversor. 

Durante una reunión-almuerzo, el mandatario se comprometió a mejorar el entorno legal para promover proyectos de colaboración con empresas surcoreanas y favorecer la inversión en Corea. Entre los 21 asistentes había seis destacados empresarios surcoreanos, como los presidentes de Samsung Electrónica, SK, LG o Hyundai Motor, y también CEOs de firmas extranjeras como IBM, JP Morgan, Qualcomm, Hitachi, Shell y Nestlé. 

Yoon explicó su perspectiva económica centrada en el mercado y el sector privado, la amplia red de tratados de libre comercio suscritos por Corea del Sur, su elevada competitividad tecnológica y la cualificación de la fuerza laboral del país. 

También solicitó a las empresas invertir activamente en Corea del Sur, anticipando mejoras en los sistemas o marcos regulatorios del país para hacerlos compatibles con los estándares globales y favorecer la actividad empresarial. 
 
La reunión culminó con resultados tangibles pues la empresa danesa VESTAS, líder en aerogeneradores para producir energía eólica, anunció que invertirá 300 millones de dólares en abrir una fábrica en Corea del Sur.