El posible fin oficial de la Guerra de Corea es un tema candente estos días, después de que aludieran sucesivamente el presidente estadounidense Donald Trump y Presidencia surcoreana a que un debate al respecto podría comenzar. La atención se centra por tanto, en si las negociaciones para la desnuclearización y el arraigo de un sistema de paz podrían dar el fruto esperado: desmantelar completamente el programa nuclear de Corea del Norte y promover una estabilidad perpetua de la península coreana.
El debate sobre finalizar de una vez por todas la Guerra de Corea fue mencionado simultáneamente por Estados Unidos y Corea del Sur. Primero, el presidente estadounidense Donald Trump comentó durante la cumbre con el primer ministro japonés Shinzo Abe el día 17, que aplaudía la iniciativa tomada por las dos Coreas para avanzar en el debate sobre el fin oficial del conflicto bélico que protagonizaron hacen más de medio siglo. Y justo al día siguiente, el miércoles 18, el jefe de la Oficina de Seguridad Nacional de la Casa Presidencial de Corea del Sur, Chung Eui Yong, informó que había comentado con su homólogo de Washington -el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Bolton- sobre cómo establecer un sistema de paz en la península coreana y lograr la desnuclearización. Al respecto, una fuente del Gobierno surcoreano puntualizó incluso, que barajan la opción de sustituir el Acuerdo de Armisticio por un tratado de paz.
En realidad, la posibilidad de un sistema de paz en la península coreana fue planteada ya hace dos décadas. En los años 90, el propio régimen de Pyongyang presentó, mientras continuaba la primera crisis nuclear norcoreana, un plan que proponía implantar un nuevo sistema por fases, que iban desde desechar el Acuerdo de Armisticio y retirar las tropas estadounidenses de la peninsula coreana, conforme a un tratado de paz entre Corea del Norte y Estados Unidos, hasta arraigar la paz perpetua. Esta sugerencia no se tradujo sin embargo en algo real, pues la primera vez que un debate se llevó a cabo al respecto fue entre 1997 y 1999 en el marco de un diálogo a cuatro bandas entre las dos Coreas, Estados Unidos y China. Lamentablemente, este intento se frustró debido a peticiones poco racionales de Corea del Norte, que exigió la firma de un tratado de paz solo con Estados Unidos, excluyendo a Corea del Sur, así como la retirada inmediata de las fuerzas estadunidenses de la península coreana.
Más tarde, trataron de retomar el debate y hasta cimentaron una base institucional a tal efecto, al comprender la declaración del 19 de setiembre de 2005, emitida en el marco del diálogo sixpartito sobre el problema nuclear norcoreano, que adelantó que las naciones participantes de esas conversaciones multilaterales negociarán en un foro aparte la posibilidad de un sistema de paz perpetua. Asimismo en la cumbre intercoreana de 2007, los líderes acordaron declarar el fin definitivo de la Guerra de Corea entre tres o cuatro naciones. No obstante, y pese a parecer que el ambiente mejoraría, dicho intento no funcionó y así se llegó a la actual situación.
Por lo pronto, sobre la posibilidad de reiniciar el interrumpido debate, los especialistas opinan que poner un punto y final a la Guerra de Corea y establecer un sistema de paz resulta indispensable para solucionar el problema nuclear norcoreano. Y en base a este análisis, señalan que, a la larga, las venideras cumbres intercoreana y entre Estados Unidos y Corea del Norte, darán paso a las negociaciones a seis bandas para retomar el debate pertinente.