ⓒNetflix, Inc.

‘Squid Game’ o ‘El juego del calamar’ es la serie original de Netflix más popular estos días. Se trata de una producción surcoreana que actualmente ocupa el primer lugar de audiencia en casi todos los países a los que llega dicha plataforma de streaming, y se ha convertido en la primera serie surcoreana en subir al puesto número uno del ranking de Netflix en Estados Unidos. Concretamente, es la serie más vista en 76 de los 83 países donde Netflix ofrece sus servicios, según FlixPatrol, un sitio web que mide la popularidad de los contenidos de las principales plataformas de streaming del mundo.

‘El juego del calamar’ trata sobre un grupo de personas gravemenete endeudadas, que compiten en una serie de juegos infantiles apostando su propia vida, para ser el ganador final y obtener el gran premio: 45.600 millones de wones. La estructura narrativa sigue la de las películas de juegos de muerte tipo ‘Running man’ o también ‘Battle Royale’, una película japonesa sobre unos jóvenes abandonados en una isla que deben superar violentas pruebas para sobrevivir, e incluso aniquilarse entre sí, para ser el único ganador. Didh oesto, la serie ‘El juego del calamar’ destaca del resto por mezclar la lógica de la “supervivencia del más apto” -inmersa en los juegos infantiles tradicionales de Corea- con el género de juegos letales, para retratar la distopia social de una forma nunca antes vista en el cine y la televisión. 

En el sitio web de crítica cinematográfica y de contenidos televisivos rottentomatoes.com, que mide la “frescura” y valora las producciones, la serie recibió un puntaje del 100%, y también ha conseguido excelentes valoraciones de la prensa internacional. La revista estadounidense Forbes, por ejemplo, comentó que se trata de la serie más extraña pero cautivadora de todas las producidas por Netflix, mientras que el sitio especializado en cultura pop del diario New York Post la elogió por dramatizar con impacto y alto grado de suspense ideas de lo más frescas.

La opinion en común de la crítica es que la primera impresión que deja la serie surcoreana en la audiencia es de extrañeza e inverosimilitud con los coloridos sets, unos juegos extremadamente simples -que hasta parecen artificiales- y personas con la misma vestimenta deportiva que muestran sus escenas; sin embargo, la microsociedad que bosqueja es una maqueta de la sociedad actual. En otras palabras, las serie es una alegoría de la sociedad contemporánea, donde la competencia es casi mortal y solo quienes se imponen a los débiles resultan ganadores, de ahí su potencial para calar entre el público.

Pero además, el éxito de ‘Squid Game’ es una prueba más de la fuerza de los contenidos de Corea del Sur que, hoy por hoy, indudablemente es uno de los países líderes del mundo en cuanto a oferta cultural, y cuyo portafolio incluye ya varias producciones aplaudidas a nivel internacional, como la película ‘Parásitos’ de Bong Joon Ho, y otras series de Netflix como ‘Kingdom’ y ‘Sweet Home’.