Hunt (헌트)

‘Hunt’ se ambienta a comienzos de la década de 1980, una época en la que en la Corea real, se desató un caos sociopolítico al ser asesinado el dictador Park Chung Hee por el jefe de la Agencia Central de Inteligencia, Kim Jae Kyu, el 26 de octubre de 1979. Un hecho que puso fin al control autócrata ejercido por Park durante 16 años sobre un país que entonces iniciaba una larga lucha contra la corrupción y el escándalo. Las circunstancias aún misteriosas de lo sucedido, que por cierto inspiró a muchos realizadores de cine, dan a Lee Jung Jae amplia licencia para tramar todo tipo de conspiraciones salvajes en ‘Hunt’. Un thriller político retorcido y repleto de acción, que mantiene en vilo al espectador mientras se adentra en escenarios cada vez más enredados, sobre agentes renegados, agendas cambiantes y un complot loco contra el sucesor de Park Chung Hee.

La historia comienza mostrando a unos agentes de inteligencia que intentan superarse unos a otros con el supuesto objetivo de proteger al nuevo líder, un militar que ha entrado en el núcleo del poder a la fuerza tras encabezar un golpe de Estado y reprimir brutalmente tanto a sus detractores como a los ciudadanos que pedían democracia. En esta situación, posterior al asesinato del dictador Park Chung Hee por el director nacional de inteligencia y en la que un tipo igualmente podrido ambiciona a tomar el poder, las lealtades son frágiles y la desconfianza altísima. 

Es confuso quién podría ser el héroe de la película: la persona que planea derrocar a ese nuevo líder, que promete ser otro dictador déspota o quien arriesga su vida para protegerlo con el fin de acabar con el caos y poner orden. Puede que este trasfondo político sea percibido como una barrera por el espectador, pero desde ya puede estar tranquilo porque para apreciar lo que ocurre en la pantalla y disfrutar de la cinta no necesita saber mucho sobre la historia de Corea. Pues con solo seguir la trama y tratar de adivinar la psicología de los personajes, la experiencia de ver ‘Hunt’ se vuelve mucho más intensa y rica. 

ⓒHanahreum COMPANY

Rostros del cine coreano: Heo Sung Tae

Heo Sung Tae debutó como actor tras participar en un programa televisivo de audición pública, aunque quedó eliminado antes de llegar a la final. Sus inicios como actor fueron duros porque no le llegaban papeles. Su mayor impedimento era su aspecto, no precisamente de un galán de telenovela. Por suerte, la paciencia era su mayor cualidad y la perseverancia su mejor arma. Entonces aceptaba cualquier papel que le ofrecieran, desde roles muy pequeños y hasta extras, hasta que poco a poco empezó a dejarse notar, siendo las obras en las que llamó la atención tanto del público como de los productores y directores, ‘La edad de la sombra (밀정)’, en la que la curiosidad de los espectadores por él creció al reconocerle como el “hombre de las bofetadas” al lado de Song Kang Ho, y la super taquillera ‘The Outlaws (범죄도시1)’, que hasta la actualidad es referida como la película que impulsó la carrera de Heo Sung Tae. 

Ahora, Heo Sung Tae es un actor en sumo solicitado. Además es popular, mientras que su rostro es conocido dentro y fuera de Corea. Su mejorada posición como actor dentro de la industria cinematográfica surcoreana se comprueba en los papeles que le son ofrecidos, que no solo aumentaron en cantidad, sino que son más importantes y de mayor peso dentro de la trama. Por supuesto, este éxito no le hubiera llegado a no ser por la dedicación que siempre muestra como actor y el satisfactorio trabajo interpretativo que realiza en cada papel, y en todas las películas o serie televisivas en las que participa, como la archifamosa ‘Squid Game (오징어 게임)’.