El presidente Moon Jae In urgió el lunes 18 a sus secretarios y asesores trazar lo antes posible un plan para administrar dosis de refuerzo a los vacunados con Janssen, considerando los estudios que muestran que la efectividad de dicha vacuna se debilita drásticamente con el tiempo.
El mandatario aludió a unos informes que revelan que la vacuna monodosis Janssen es menos efectiva que las de Pfizer o Moderna, que requieren dos dosis separadas por un determinado periodo.
Uno de esos estudios fue presentado la semana anterior en Med Archive, una web que publica tesis sobre medicina, sobre el seguimiento que investigadores estadounidenses realizaron sobre 620.000 soldados vacunados con Janssen, para descubrir que el efecto preventivo de dicho fármaco bajó del 88% a apenas un 3% en cinco meses, entre marzo y agosto de 2021.
En Corea del Sur, la vacuna de Janssen se usa desde junio y hasta la fecha fue administrada a casi 1,5 millones de ciudadanos, incluidos los reservistas de entre 30 y 59 años, y funcionarios de entidades públicas de defensa nacional y relaciones exteriores.
Por ahora, el Gobierno comenzará a suministrar dosis de refuerzo a esas personas desde diciembre, pero cada vez más voces abogan por adelantar dicho plan, ante el rápido debilitamiento del efecto preventivo de la vacuna de Janssen.