La agencia internacional de calificación crediticia Fitch prevé que la economía surcoreana mantendrá a medio plazo un estable ritmo de crecimiento, considerando la capacidad de recuperación mostrada durante la pandemia. Sin embargo, advierte de posibles factores de riesgo latentes, como el envejecimiento de la población y la tensión en la península coreana, cuyo impacto podría crecer si sigue aumentando la deuda fiscal.
En cuanto a la economía surcoreana en el último año, Fitch evalúa que la brusca subida de la demanda de chips y equipos electrónicos a nivel mundial benefició tanto al sector manufacturero como a las exportaciones de Corea del Sur. En todo caso, sus analistas señalan que si bien el tono de las exportaciones surcoreanas es favorable, el ritmo de crecimiento está disminuyendo. Además, prevén que la deuda fiscal, que ya aumentó bastante por la pandemia, seguirá ampliándose, dificultando los programas y la inyección de dinero público para paliar los efectos del envejecimiento poblacional.
No obstante, Fitch prevé que la deuda fiscal no afectará a la nota crediticia de Corea del Sur, al menos durante los próximos años, gracias al nivel satisfactorio de indicadores externos, como el superávit por cuenta corriente y la reserva de divisas.
En cuanto a la subida del tipo de referencia efectuada en agosto por el Banco de Corea, la agencia destaca que fue la primera realizada entre las economías de Asia-Pacífico, y refleja tanto la burbuja inmobiliaria como la elevada tasa de endeudamiento de los hogares surcoreanos.