El jueves 4, Corea del Sur reportó 107.894 nuevos casos de COVID-19, incluidos 435 procedentes del exterior. El volumen de contagios diarios aumentó 1,22 veces respecto a la semana pasada, aunque el ritmo de propagación ha mostrado señales de ralentización.
En tanto, los pacientes graves totalizan 310 personas hasta la fecha, 1,58 veces más que el jueves pasado. Siendo la primera vez que se registran más de 300 enfermos graves desde el 18 de mayo, de los cuales el 84,5% son personas mayores de 60 años.
Ante la adversidad, el Gobierno ha prometido medidas para proteger a los grupos de alto riesgo. Si bien ha enfatizado que no frenará la vuelta a la normalidad, anticipando también un ciclo académico "normal" para el segundo semestre, salvo que surjan cambios imprevistos en la situación nacional de COVID-19.