Tanto Seúl como el área metropolitana, es decir, la provincia de Gyeonggi y la ciudad de Incheon, siguen manteniendo mala calidad del aire y muy elevada concentración de partículas contaminantes, aunque se prevén mejoras con las lluvias previstas durante la semana.

El denso esmog provoca en estos momentos pésima visibilidad, tanto que es difícil hasta discernir la forma de los edificios al otro de la calle, mientras que un cielo gris cubre la zona capitalina y la alerta por PM2,5 - o partículas en suspensión inferiores a 2,5 micras- continúa activada. 

También hay mala calidad del aire en Sejong y Chungcheong, donde la concentración de PM2,5 aumentó hasta 36 microgramos por metro cúbico. En cambio, la situación mejoró en la zona sur y desactivaron las medidas de emergencia contra la contaminación atmosférica.  

De cara a los próximos días, el Instituto Nacional de Investigación Medioambiental explica que al estancarse las corrientes persistirán los altos niveles de partículas en suspensión, al menos hasta el jueves en Seúl y el área capitalina. 

Así, recomiendan salir de casa lo menos posible, sobre todo a niños, ancianos y aquellos con enfermedades respiratorias, limpiar las superficies con trapos húmedos para prevenir la acumulación de polvo en interiores, y usar siempre mascarilla en caso de realizar actividades al aire libre.

Además, al empeorar la calidad del aire, los principales destinos turísticos de Corea reportaron un descenso considerable de visitantes los días 7 y 8, durante el fin de semana, aunque algunos festivales regionales y en resorts de esquí no disminuyó la afluencia de público.