La baja natalidad ha obligado a casi 10.000 guarderías a echar el cierre en Corea del Sur. 

Según datos del Ministerio de Salud y Bienestar, a finales de 2022 había 30.923 guarderías en el país, 9.315 menos que las 40.238 de 2017. Esto implica que durante los últimos cinco años cerró uno de cada cuatro establecimientos de cuidado infantil, principalmente aquellas a cargo de particulares en bloques de viviendas. 

En el caso de las guarderías residenciales, remitieron casi un 40% entre 2017 y 2022 pese a ser las más demandadas entre los padres por su ubicación en bloques de apartamentos y por su ambiente más íntimo y familiar que las públicas o las privadas institucionales.

Como motivo principal, destaca la baja natalidad. Por ejemplo, la tasa de fertilidad en 2018 cayó por debajo un bebé por mujer y tuvo mayor impacto en este tipo de instalaciones, que suelen cuidar a niños menores de un año.

Las organizaciones de padres urgen a adoptar medidas eficaces para solventar el problema, como un marco sistemático para regular la oferta y demanda de cuidado infantil, previo al plan que el Gobierno prevé activar en 2025 para integrar el cuidado infantil y la educación preescolar para optimizar y ampliar los servicios.